Si rompo un plato lo pago
I
Cuando
voy a un restaurante
y pido un plato de caviar
con
bebidas de ultramar.
Frente
a mi mesa Vicente,
revisó
discretamente
cuanto
pudiera costear,
así
que decidió ordenar
del
menú un embutido
y
lo veo muy sorprendido
a
la hora de pagar.
Pues
el mozo en la factura
Le
cobraba varias cosas
Que
no eran de su mesa.
Cambió
su faz la figura,
Se
quejaba con altura
Yo
no he consumido eso
Vinos,
paellas, ni queso
Jugos
de varios sabores
Postres,
caviar ni licores
Lo
que ha puesto es un exceso
Yo
no voy pagar eso.
El
mozo le respondió
Que
no estaba en discusión
Si
era vino o salchichón
A
los ojos lo miró
Y
enojado le gritó
Ya
la factura está impresa
Es
la cuenta de su mesa
Y
la tiene que pagar
Puede
usted hasta patalear
Pero salde antes la mesa.
Como
conozco al gerente
Del
lugar me voy sin prisa
Pues
la cuenta de mi mesa
Le
fue cargada a otra gente
Y
entre ellas a Vicente
Salgo
de cenar contento
Sin
daño a mi presupuesto
Y
compartí con mi amante
Hasta
un vino espumante
Dejé
a Vicente molesto.
II
Esto
que relato arriba, no es sólo imaginación
Es
el trato que recibe, de este gobierno la gente
Avaro,
voraz, injusto, perjudicial e indecente
De
recursos insaciable, de una infinita ambición.
Turpen
el de Boca ’e Chivo, no es de Harold un invento
Es
un personaje real, que se mueve entre nosotros
Con
suntuosos privilegios, y carros pescuezo largos
Con
tarjetas que tú pagas, algunos viven del cuento.
Tienen
exoneraciones, apartamentos de lujo
Despilfarran
el erario que costó nuestro trabajo
Se
liquidan con millones, se pensionan trabajando
Cuanta
vergüenza le falta, a quienes deben servirnos
Que
en vez de ganarse el sueldo, estudian como engañarnos
Y
si esto os parece poco, pasan la vida viajando.
III
Nos
desangran el estado, cual si fueran sanguijuelas,
Venden
al mejor postor, hasta nuestros propios suelos,
Regalan
níquel y oro, a cambio de tres centavos,
Ni
si quiera les importa del ambiente las secuelas.
Entre
tanto que las leyes favorecen los gigantes,
Los
contratos se realizan como cheque al portador
Y
El subsuelo se regala a cualquier explorador
Aquí se sigue haciendo, lo que siempre se ha
hecho antes
Si
Bosch estuviera vivo, estuviera depresivo
Sin
pensar mucho en su edad, Formara un tercer partido
Siempre
estuvo convencido de un gobernar diferente.
De
que se sirva al partido, para así servir al pueblo
No
servirse del partido aunque se castigue al pueblo
El
se ocupó de estar siempre al servicio de la gente.
IV
Escándalos
sobreabundan, La SunLand no tiene luces
Sólo
tiene un lado oscuro, obras sobrevaloradas
Funcionarios
sin amor, conciencias cauterizadas
Hace
mucho que mi pueblo se está cayendo de bruces.
Qué
vergüenza que un gobierno, que se veía tan decente
Quiera
que este pueblo pague, lo que aún no ha disfrutado
Quieren
pasarle factura de lo que otros se han robado,
Y
a pesar de lo que dice, nos trate como a Vicente
Lo
que se ve en el estado, no es más que
excesos y abusos
¿Que
estamos en una crisis? No puede ser de
otro modo
Manejando
de esta forma del estado los recursos
Exhibiendo
con orgullo sus placas de corrupción
Que
reduzcan privilegios de los que se llevan todo.
De
los que han empobrecido con usura la nación
V
¡Vamos
a quemar las cañas!, Dijera Máximo Gómez
Hasta
que no quede nada que les interese a España
Y
en aires de libertades comenzar una campaña
De
echar el país pa’lante sin intereses banales
República
inagotable, Que lema tan atinado
Tiene un ministerio nuestro, secretaria de
turismo
Porque
hace quinientos años que están haciendo lo mismo
Hacen
cinco siglos ya, que se desfalca el estado.
Que vergonzosa propuesta, la del gobierno de
turno
Pretendiéndonos
cobrar, lo que no hemos consumido
Ya
tienen que percatarse, que es el momento oportuno
De
revisar los contratos, que parecen ser
regalos
De
perseguir los escapes de dineros mal habidos
De
defender el país de quienes quieren matarlo.
VI
¿Por
qué tengo que pagar los platos rotos?
Ni
siquiera me invitaron a la fiesta
Si
debo pagar lo mío no me molesta
Pero
no es justo que yo pague lo del otro.
VII
No
hay un dialogo posible, entre un
gobierno indolente
Y
un pueblo que por demás, no soporta ya la carga
Cuando
el gobernante es sordo, no hay deprecación que valga
No
hay resultados distintos, si el método no es diferente.
La
reforma está cocida, estaba pre elaborada
Donde
falta la vergüenza y sobra tanta corrupción
No
hay que descifrar razones, ni buscar explicación
Se han bajado ya las líneas, para que esta sea
aprobada.
Ojalá
esté equivocado, y lo que escriba sea incierto
Y mis
especulaciones se limiten sólo a eso
Y que
todo huela a nuevo, y de rumbo cambie
esto
Y
que el gobierno comprenda, lo que no había contemplado
Que
abran bien los oídos, para que escuchen bien esto:
No hay que reformar el fisco, que
se reforme el estado.